Capilla del Monte se prepara para el feriazo por el Buen Vivir

“Los feriazos nacen con el espíritu de visibilizar los problemas del sector rural y ofrecer a la comunidad alimentos agroecológicos a precios justos”, comienza Sofía Zorzini, integrante de la Feria por el Buen Vivir y de “Saberes y Sabores”; una red de comercialización de alimentos ecológicos.

Cada feriazo, también busca ser una forma de protesta y de comercio justo: “desde donde se promueve la soberanía alimentaria, que es el derecho de los pueblos a decidir sobre su alimentación y producción de alimentos”, explica Sofía.

El primer feriazo a nivel nacional, surge en el 2016 por una convocatoria de la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT), en la Plaza del Congreso de Buenos Aires. En un contexto, donde además de visibilizar la importancia de consumir alimentos sin agroquímicos y de la economía popular, la situación económica era crítica. Hoy, en medio de un desarme de las mínimas estructuras que sostenían el accedo a derechos tan indispensables como el alimento, se hace urgente la organización y la apuesta a la producción y el consumo agroecológico.

En Capilla del Monte, el primer feriazo se realizó en la Plaza San Martín en el año 2019,  después de que reprimieran en la Plaza de Mayo, recuerda Sofía y trae aquella imagen de la señora levantando las berenjenas del suelo que le había tirado la policía.

Pasaron seis años de esa imagen que tira como si fuera un nudo aún enredado. La pulsión colectiva sale a las calles de nuevo, redobla la apuesta, a pesar de los decretos, la policía, los malos gobiernos, y la violencia que se ejerce desde el Estado hacia la comunidad. Apostar a otra forma de producir, es enfrentar a un modelo de producción extractivista bajo el imperio de las multinacionales. Sin embargo, cada vez son más las experiencias de la agroecología que habilitan a replicar y pensar otras formas de producción y consumo.

Raúl Fermanelli, es agricultor agroecológico y biodinámico del barrio Ferreyra de la ciudad de Córdoba y estará este viernes -a partir de las 12:30- brindando una charla y compartiendo su experiencia en el marco de la Feria. “Vamos a compartir recetas de esta harina de trigo tan sana y rica que nutre nuestros cuerpos y territorios”, dice Sofía.

Raúl está vinculado a la agricultura desde hace décadas. Cultiva papa, trigo, avena, ajos, soja, entre otras cosas. Su trabajo y compromiso, son una evidencia de que se puede producir sin agroquímicos de manera extensiva.

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La Feria por el Buen Vivir, sigue siendo en Capilla ese entramado de luchas que florecen. Y cada tanto, se expande y agranda para tomar la forma de estos Feriazos, que como dice Sofía, se siguen organizando “para visibilizar la feria, los productorxs y sosteniendo las mismas consignas de precio justo y de comunicar a través de charlas, talleres y prácticas sustentables para el buen vivir”.

Las redes de producción familiar, los alimentos de proximidad y libres de agrotóxicos, son indispensables para contribuir a la soberanía alimentaria, entendida como un derecho de los pueblos a poder decidir sobre la producción de alimentos de forma sostenible, nutritivos y culturalmente adecuados y accesibles. La agroecología se convierte así en un aspecto esencial que contribuye cada vez más al desarrollo de sociedades sanas en función de sus alimentos.